lunes, 31 de enero de 2011

PRESENTABLES

Hay que estar presentables. Nos lo han dicho miles de veces. Para una reunión, para un acto, para una cita. No será que no estamos avisados con reiteradas advertencias. Hemos de estar bien aderezados, estupendamente perfumados y limpios, originalmente vestidos sin caer en la ostentación ni en el ridículo. Hay que salir por ahí y quedar muy dignamente.

Antes eran las madres quienes cuidaban estos temas, antes de que se hicieran muy mayores. Hoy es la esposa, o el compañero, o la hermana que sabe mucho, o la vecina que te aprecia. Y está muy bien que no salgamos por ahí hechos unos adanes, ni abandonados en nuestros propios desperdicios.

Pero, y me lo he preguntado muchas veces, ¿qué hay detrás de todos estos bondadosos consejos? Que la sociedad pone sus propias normas lo sabemos todos, y sus modas, sus etiquetas, sus predilecciones. Pero, ¿qué se oculta tras las recomendaciones, con muchas buenas intenciones que lleven?

El ir a cualquier sitio presentable bien presentable, ¿por qué demonios es? Nos arreglamos, quizás exageradamente como buenos obedientes. Pero después del protocolo, ¿somos acaso mejores de lo que somos? ¿tapamos nuestras miserias con un toque de distinción?

Puede que salvemos el honor en nuestro entorno inmediato, pero ¿somos lo que realmente somos y queremos ser o lo que obligan las circunstancias?

¿Qué escondemos realmente detrás del escudo? Es más, tras la cita, ¿nos quitamos la máscara?

Y si es así ¿por qué nos la ponemos y quitamos constantemente?

Nos vamos a volver completamente locos.

Música sugerida: SOCU. Coen Bais

2 comentarios:

  1. tal vez nos gustamos poco y acicalándonos conseguimos un poco más, si encontramos el equilibrio entre lo que nos ponemos y lo que somos no nos volveremos locos, creo que no.

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  2. 2 observaciones:
    - Cuando la abuela te decía eso de que te mudaras de ropa interior por si te pasaba algo o si ibas al médico: vamos a ver, si tengo un accidente, lo que menos me importa es cómo llevo las bragas y segundo, ponerte la mejor ropa interior para ir al médico....¿el médico es profesional de lencería o qué?
    - Y segundo, cuando mi madre aún me pone cara rara cuando me pregunta: ¿Qué le vas a decir que se ponga? Y yo le suelto: ¿Es que no es "mayorcico" para que se lo piense él?...Esa gran generación en la que le dicen a los maridos que ponerse...

    Ahora entiendo por qué cuando estuve en cada de los progenitores fue cuando más radical me volví con el gótico.

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