Cuando en octubre del año pasado mi hija Marta me preparó el blog, algo que yo ignoraba realizar completamente, me dijo: "Hale, escribe, cuenta, este espacio es tuyo", y yo lo tomé como un reto. Porque escribir siempre me gustó, pero bien es cierto que la mayoría de los manuscritos acababan en la papelera. ¿A quién le iba a importar lo que yo escribiera o dejara de contar?
En cierto modo supuso para mí un mayor grado de responsabilidad, pues representa asomarme por esta ventana con cierta asiduidad y transmitir sentimientos, emociones, sueños...
Y desde octubre aquí estoy, intentando ser fiel con quien quiera compartir conmigo esos mismos sueños o de algún modo se identifique con determinadas reflexiones. Aquí estoy y espero seguir. Y he de confesar que es para mí un auténtico placer que alguien, desde el otro lado y a saber desde dónde, me anime, me aliente, me cobije en sus propios sueños. Por eso espero seguir.
Pero abandono este habitáculo informático durante unos días. Me retiro con los míos para disfrutarlos y para vivirlos, que uno ya se desespera un poco de no alcanzar nunca ese privilegio que son los trozos de tiempo en familia.
Volveré en unos días y confío en que podamos seguir compartiendo ternuras del corazón y rebeldes avispamientos.
Sólo me queda, mientras tanto, hacer pública y patente mi gratitud a todos vosotr@s por estar ahí, tan lejos y tan cerca, compartiendo o disintiendo mis textos salidos del alma.
Cuelgo, como tema musical que acompañe, a unos casi completos desconocidos, lejos de la fama comercial y de aforos multitudinarios. Son buenos ellos y propongo la escucha de una célebre pieza de Quenn.
Recibir un beso, de esos de los grandes.
Música sugerida: BOHEMIAN RHAPSODY. California Guitar Trío
disfruta de tus vacaciones. Y gracias a ti por tus textos. Te esperamos.
ResponderEliminarnos gustan tus escritos ,salidos del alma.
ResponderEliminarFelices vacaciones.
Que disfrutes de tus vacaciones.Seguro que vienes cargadito de experiencias.
ResponderEliminarUn saludo