viernes, 1 de octubre de 2010

PERMÍTETE UNA OSADÍA

Enjaulados bajo las losas de los monólogos y las cosas cotidianas, soportando los síntomas de la vida, que nos azota para sentirnos despiertos y en ocasiones nos asusta para morir, a veces necesitamos respirar. Inflarnos de una bocanada de locura para romper protocolos y esteriotipos.

Por eso, si sigues por ahí, te diré una cosa por lo bajito:

Abraza fuerte y besa a la persona que más quieres. En la frente, en el cuello, en la boca. Donde te dejen, nunca donde quieras. Es lo más bonito y hermoso. Sentir un contacto, una mano, unos labios, unas palabras de conformidad y aliento. Sentir a quien más amas. Porque todo eso vale más que mil decretos ministeriales y fusiles cargados de fuego.

No pierdas ni un instante. Si no está contigo ve en su busca, o besas por teléfono, o bien queda para mañana.

Es verdad que un segundo de besos puede resultar una eternidad. Corre, ve a su encuentro, como si fuese la última vez.

Pero no des el último beso, ni el último abrazo, ni la última insinuación.

Da el mejor de los besos, el mejor de los abrazos y lo mejor de tí.

Texto de: Los Secretos de la Noche (1987)

Autor: Juan José Torres

1 comentario:

  1. qué buen programa aquel, Juanjo, a ver si cuelgas por aquí algún audio de aquella aventura. La mejor radio que hubo en Villena.

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